Análisis de riesgo de la población expuesta a volcanes
Basado en un modelo de simulación con Vensim
Rosa Gabriela Regalado León
rosiregalado@gmail.com
Ecuador se encuentra atravesado por la Cordillera de los Andes en la que existen volcanes activos que ponen en peligro a varias poblaciones asentadas en sus zonas de influencia. Este es el caso de las ciudades de este país que se encuentran en las áreas de paso de lahares (flujos de lodo formados por el descongelamiento violento del casquete glaciar existente) que se formarían por la erupción del volcán Cotopaxi, el volcán activo más alto del mundo.
La última reactivación del Cotopaxi, en el mes de Abril del 2015, ha obligado a las autoridades y a la población a enfrentarse a una situación hace tiempo olvidada, ya que la última gran erupción registrada sucedió en el año de 1877. Desde entonces, un gran número de personas se ha establecido en las orillas y áreas cercanas de los ríos por donde transitarían los lahares en caso de erupción. Se ha estimado que existen aproximadamente unos quinientos mil habitantes en las zonas de riesgo o afectación del volcán, por lo que en caso de ocurrir una erupción del Cotopaxi, esta representaría un desastre de magnitud importante para el Ecuador. La población y las autoridades tienen por lo tanto en sus manos una importante tarea de capacitación, planificación y acción por delante para reducir al máximo el impacto que se generaría por este desastre.
El proyecto “Simulación de aplicación de mecanismos de reducción de riesgo para la población expuesta al riesgo volcánico: Volcán Cotopaxi, Ecuador” utiliza la dinámica de sistemas como una herramienta para enfatizar y demostrar la importancia de la aplicación de medidas de mitigación y reducción de riesgo, con el fin de preservar la vida de los habitantes de la zona de riesgo del área del Valle de los Chillos, población que sería severamente afectada cuando el evento suceda.
Ecuador, el cuarto país de menor extensión de América del Sur, se encuentra localizado en la sección Noroccidental del continente sobre la línea Equinoccial. Geográficamente ha sido dividido en cuatro regiones: Costa, Sierra, Oriente y la Región Insular o Galápagos. La región Sierra o Andina se encuentra atravesada de norte a sur por la Cordillera de los Andes, misma que está conformada por varios volcanes en estado activo, convirtiendo al país en uno de los que presentan las más altas concentraciones de volcanes activos alrededor de zonas con alta densidad poblacional en el mundo.
Es precisamente en esta cadena volcánica que se encuentra el volcán Cotopaxi, que con 5897 m de altura, es considerado el segundo volcán activo más alto del alto del mundo y también uno de los más peligrosos debido a que como resultado de sus erupciones se pueden formar enormes lahares (flujos de lodo y escombros) producto del derretimiento súbito del glaciar, que transitarían por cauces de ríos que atraviesan varias provincias del país y en cuyas orillas se encuentran zonas con una alta densidad poblacional.
El volcán Cotopaxi se encuentra localizado en la provincia del mismo nombre en la Sierra central del país, en las coordenadas 0°38’ S y 78°26´O sobre la cordillera Oriental, a una distancia de 35 km al Noreste de la ciudad de Latacunga y a 45 km al Sureste de Quito, la ciudad capital, como puede verse a continuación:
Las Potenciales Zonas de inundación por Lahares en el Volcán Cotopaxi, Ordóñez, et al, 2013
La última gran erupción registrada ocurrió en el año de 1877. Según los datos históricos que han podido ser recopilados, causó grandes estragos y destrucción en las cuencas asociadas al sistema hídrico que nace en el volcán.
De acuerdo a Aguilera y Toulkeridis, 2005, debido a la reciente edad geológica del volcán, una nueva erupción es un hecho cuya fecha de ocurrencia es imposible de precisar. Sin embargo, en base a los datos históricos, existe una elevada probabilidad de que suceda en los próximos cincuenta años. Utilizando la historia eruptiva del volcán, el tiempo promedio entre erupciones es de 117 ± 70 años, por lo que tomando como referencia la última erupción de 1877, el actual intervalo de reposo se encuentra dentro del promedio estadístico de erupciones.
El drenaje norte del volcán está conformado por los ríos Pita y El Salto que aguas abajo se unen con los ríos Santa Clara y San Pedro que atraviesan poblaciones con una alta densidad poblacional como Sangolquí, el Valle de los Chillos, Cumbayá y otros poblados del Distrito Metropolitano de Quito, capital del país. La reactivación del Cotopaxi obligó a la población y a las autoridades a retomar un tema que se ha mantenido latente por muchos años. La costumbre a la presencia del volcán, conocido como activo pero en estado de reposo, condujo al establecimiento descuidado de la población en plenas zonas de tránsito de lahares, aumentando de manera dramática en los últimos seis o siete años en el Valle de los Chillos, sin que existiera control en base al riesgo volcánico por parte de las autoridades.
En un estudio realizado por la Escuela Politécnica del Ejército en colaboración con la Universidad de Pisa, se determinó que el tiempo de llegada de los lahares al Valle de los Chillos en un evento máximo con volúmenes mayores a 40 millones de metros cúbicos (igual al de 1877) es de aproximadamente 30 minutos, con alturas de entre 7 y 30 metros que sumergirían un área representativa de las poblaciones causando graves daños tanto en vidas humanas como en infraestructura.
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